La Quiropráctica o Quiropraxia es una profesión de la Salud reconocida por la OMS, la cual se ocupa del diagnóstico, tratamiento y prevención de las alteraciones del sistema músculo-esquelético, así como de los efectos que producen estos desórdenes en la función del sistema nervioso y en la salud en general. Esta disciplina diagnóstica, trata y previene los trastornos del sistema neuromúsculoesquelético y de sus efectos sobre en la salud general, fundamentándose principalmente en la relación de la estructura de la columna vertebral y la función corporal, y la forma que esa relación influye sobre la salud de la persona. La filosofía Quiropráctica establece que las enfermedades ocurren por consecuencia del mal funcionamiento del sistema nervioso, protegido por la columna, repercutiendo en todos los tejidos y órganos. Mediante técnicas manuales busca a través de técnicas manuales sobre la columna mejorar la función del sistema nervioso restableciendo la salud general del paciente.
La quiropráctica emplea técnicas manuales denominadas ajustes articulares o manipulaciones, aplicados sobre la columna vertebral, articulaciones de extremidades y otros tejidos, centrándose principalmente en el tratamiento de “las subluxaciones o complejo de subluxación vertebral (CSV)”. “La subluxación quiropráctica es un conjunto de alteraciones funcionales, estructurales, o patológicos, que afectan la función del sistema nervioso, y que repercute en la función de todo el cuerpo”. La subluxación se traduce en el mal posicionamiento de las vértebras que conforma nuestra columna vertebral. Por tanto la subluxación es la principal causa de dolor, problemas articulares, musculares, nerviosos y viscerales.
El tratamiento de la subluxación permite restablecer la función normal de los sistemas nervioso y musculo esquelético sin la utilización de fármacos ni cirugías, que muchas veces no resuelven los problemas de salud de los pacientes y enmascaran el dolor, por lo que los problemas musculoesqueléticos persisten para luego reaparecer.